Muchos piensan que la creatividad es solamente para genios y/o para personas del mundo de la publicidad y las estrategias; nada más errado. Todos somos creativos, pero no por decreto, sino por naturaleza humana. Por eso, cuando la dirección general parte de la opinión que «no hay una mejor forma», sino solo «mejores formas de hacer las cosas», las personas pueden ser motivadas para pensar en cómo mejorar sus métodos de trabajo. Y siempre ha sido, es y será así, porque al evolucionar todo, nada seguirá igual, y siempre se podrá hacer lo que se ha hecho, de manera diferente.
Cada día nos “podemos inventar”, y cada día podemos “retar” la creatividad, tratando de hacer las cosas de una manera que genere más beneficios para todos.
Como afirma el español Franc Ponti en Si funciona, cámbialo, cuando las cosas están ocasionando buenos resultados, los demás tratarán de hacer las cosas o igual o de otra manera para buscar superar los éxitos alcanzados; además, copiar es común en un mundo en el que cada vez “aparecen” cosas nuevas. Por ello, hay que retar la creatividad, pero sin hacer locuras, aunque hay que equivocarse, puesto que quien no se equivoca es porque nada hace.
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